Running en familia

Cuando hablamos de las propiedades del running (en cuanto a facilidad para practicarlo) siempre destacamos lo económico y lo fácil que es de practicar y por supuesto que es un deporte individual. Sin embargo no es una mala idea sacarlo de su clasificación habitual para convertirlo en un deporte en familia. Evidentemente a distintos niveles, pero no existe una edad para correr, cualquiera puede hacerlo, por lo que podrás compartirlo con tu pareja, tus hijos e incluso tus mascotas. Ya sabes que el running mejora mucho la calidad de vida, tanto a nivel psicológico como a nivel fisiológico, de estos beneficios pueden aficionarse tanto adultos como niños. Si eres un corredor con cierta experiencia, puedes aprovechar tus días de descanso para hacer un “entrenamiento light” y disfrutar de tu pasión y tu familia. Es una buena forma de iniciar a los niños en el deporte y de mantener la perfecta la salud de tu mascota. Cada vez son más las pruebas que están adaptadas a niños, con recorridos y distancias más moderadas, así que si le cogéis el gustillo podéis ir juntos a innumerables competiciones. Siempre y cuando no lo toméis como un reto, sino como un entretenimiento, los niños deben saber que es algo que hacer juntos pero no una obligación hacia un objetivo. Cuando salgas en familia olvídate del tiempo, de la zancada y de los kilómetros. Muchas veces vemos a padres participando en carreras populares empujando un carrito de bebe, así que si has sido padre hace poco no tienes excusa para dejar de entrenar. Querer es poder y si has conseguido alcanzar un buen nivel no lo dejes. Así que ya sabes, cuando llegue un fin de semana y no sepas qué hacer, planea un divertido día familiar combinando deporte, aire libre y lo que surja después.