Los refugiados tendrán representación en Río
Desde el Comité Olímpico Internacional (COI), y a través de su presidente, Thomas Bach, se ha anunciado la participación de un grupo de refugiados en los Juegos de Río con el objetivo de enviar un mensaje "de esperanza y confianza y denunciar la situación por la que los refugiados están pasando a todo el mundo.
De este modo, el grupo de refugiados que participará será de unas cinco y diez personas y se buscará encontrar también a los atletas mejor cualificados que no tienen demasiada esperanza y a los que se les ha invitado competir bajo la bandera olímpica.
Un hecho sin precedentes exactos
Aunque pueda parecer una decisión completamente revolucionaria, lo cierto es que ya en 1992 con la Guerra de los Balcanes, los deportistas que eran procedentes de Yugoslavia ya utilizaron la bandera olímpica, la que contiene los cinco aros para poder participar. Más recientemente, en en el año 2000 los atletas de Timor Oriental hicieron lo propio en Sidney, aunque la parte más novedosa pasa porque esta será la primera vez en la historia de esta competición en la que unos refugiados compitan.
Así pues, con estas condiciones previstas, los refugiados convivirán en la Villa con el resto de jugadores y participarán en el tradicional desfile que se encarga de inaugurar el evento, el día de la inauguración de los juegos harán su aparición en el penúltimo lugar. Un buen modo, sin lugar a dudas, de dar visibilidad a un problema con el deporte: algo que siempre suele servir para derribar fronteras y aunar pasiones. Una buena iniciativa cargada de simbolismo y que pretende ser un ejemplo para otros aspectos y ámbitos dentro de la propia Unión Europea.