Caminante, sí hay camino

Si has llevado una vida completamente sedentaria y quieres comenzar a moverte debes de empezar muy poco a poco, por lo que una idea magnífica sería salir a caminar.

Pero no nos referimos a ir andando a los sitios, que a pesar de que también es bastante positivo para tu cuerpo no es necesario para ejercitarse y quemar calorías, para ello necesitas unas pautas y una rutina y de eso es de lo que hoy queremos hablarte.

Para que sepas un poco de que estamos hablando, según la OMS (Organización Mundial de la Salud) lo recomendado para adultos que no sufran ninguna patología es una media de 150 minutos a la semana de actividad física aeróbica moderada, lo que se traduce en mínimo 30 minutos de caminata al menos cinco días a la semana. Hablar del número de calorías es bastante más complicado, ya que aquí intervienen factores como el tiempo, el peso o la velocidad. Pero claro, siempre y cuando podemos intervenir para hacer nuestra pequeña ruta más intensa y productiva.

Desnivel e intervalos serán tus nuevos aliados. Al igual que sucede cuando corremos, es más efectivo hacer cambios de ritmos significativos que ir siempre constante, porque tu cuerpo tiene que ir respondiendo sin parar (tampoco intentes pasar de 0-100). Elegir zonas de cuestas, e incluso de escaleras si tu estado físico te lo permite, también hará que suba la intensidad. No solo quemarás más calorías y ayudarás a moldear la figura sino que tu paseo será mucho más ameno.

Sabemos que estás caminando pero no te olvides de los brazos. Lo mejor para intensificar la ruta es usar bastones, lo que hará que tus brazos participen más en la actividad. Usándolos, el consumo de energía aumenta entre un 8 y un 22%, un buen motivo para al menos plantearte su uso.

Llevar música animada hará que sin darte cuenta te muevas a mayor velocidad, y si a esto le sumas un podómetro o una aplicación que te informe de los avances que vas dando tu motivación irá en aumento. Intentar superarte a ti mismo teniendo datos por delante es bastante más fructífero que si tardas en observar los resultados.

Y pos favor, no hagas locuras. Nada de envolverte en plástico para sudar más o salir sin haber probado bocado o sin la hidratación oportuna. Está demostrado que ni aumenta el consumo de energía ni facilita la quema de grasa, así que no caigas en falsos mitos. Te aconsejamos que uses un buen calzado trekking y calcetines adaptados para evitar rozaduras y ampollas.