¿Qué es la economía de la carrera y qué factores influyen?
El reto de conseguir terminar una maratón en menos tiempo está a la orden del día, para ello es necesario saber qué es la economía de la carrera, concretamente cómo se mide, cómo puede mejorarse y, dado el caso, cómo modificarla para conseguir los objetivos propuestos.
Aunque en un principio pueda parecerte algo muy sencillo se trata de un concepto bastante complejo, que es el resultado de la combinación de varios factores, como el biomecánico, el neuromuscular, el respiratorio y el metabólico, todo esto a la vez que corres a la velocidad submáxima.
Todo se traduce realmente en que dos corredores con el mismo VO2max (volumen máximo de oxígeno que puede procesar nuestro cuerpo para realizar un ejercicio determinado), no tienen por qué conseguir los mismos resultados, ya que su economía de carrera, probablemente, sea muy diferente.
La economía de carrera, a groso modo, podríamos decir que es el consumo de oxígeno que se requiere dependiendo del peso durante una cantidad de tiempo o distancia determinada, o lo que es lo mismo, la cantidad de oxígeno por kilo de peso y minuto (o kilómetro) a una velocidad determinada.
El tema de cómo calcularlo lo abordaremos en otra ocasión, hoy lo que queremos es darte unas pinceladas de cómo mejorar la economía.
Por supuesto, la principal y mejor forma es a través del entrenamiento. Los más recomendables son los entrenamientos de fuerza y, en especial, las pliometrías. Con ellas consigues mejorar la reactividad del tendón de Aquiles, lo cual te permitirá aprovechar más el efecto de muelle que tienen los tendones y por ende necesitarás menos trabajo muscular.
También es interesante trabajar el entrenamiento en altitud, que aumentará la concentración de glóbulos rojos en la sangre y, por lo tanto, mejorará el transporte de oxígeno.
Aunque el entrenamiento es el principal factor, determinados factores externos influye de una forma importante. Como por ejemplo correr en subida, en bajada o con el viento a favor o en contra.
También un factor influyente es la aerodinámica. Como ejemplos puedes tener de referencia que cosas tan simples como llevar las piernas sin depilar incrementa el consumo de oxígeno en un 0,6%, llevar pelo (ni largo ni corto) un 4% y llevar ropa holgada 4,2.
Y por supuesto el tipo de zapatillas que utilices. Cuánto más pesada sea, más cuesta correr. Por lo que debes elegir una zapatilla ligera pero que permita soportar grandes impactos sin modificar la técnica de carrera.
Ten todas estas cosas en cuenta si quieres mejorar tu economía.