Las piernas también se entrenan
Seguro que habéis escuchado eso de "piernas de pollo", las típicas frases de "las piernas también se entrenan" y demás derivados. Y es que la tendencia (debemos decir que sobre todo en hombre) de entrenar sobre manera el tronco, para tener unos bíceps, unas pectorales y unas abdominales perfectas, aún sacrificando las piernas, está muy a la orden del día. Aunque de cintura para arriba puedas estar perfecto, tanto por salud como por estética, esa diferencia no es para nada atractiva.
Es cierto que los resultados en la parte superior son bastante más rápidos pero llegar a tener unas piernas fuertes tampoco es tan complicado, y nuestra misión hoy es darte un par de consejos acerca de ejercicios muy fáciles de llevar a cabo que te ofrecerán grandes resultados.
El ejercicio estrella en piernas son las sentadillas, ya que solo con variar un poco la posición del pie puedes trabajar distintas zonas y también glúteos. Para hacerlas debes colocarte de pie, con las piernas separadas aproximadamente a la altura de los hombros, espalda recta, rodillas semi flexionadas y abdomen y glúteos fuertes. Para evitar lesiones hay dos elementos muy importantes: tus pies deben estar siempre pegados al cuerpo en su totalidad y debes de bajar la cadera, tus rodillas nunca deben sobrepasar tus pies. En esta posición solo tienes que bajar y subir la cadera, cuánto más bajes más trabajarás glúteos y, combinando la posición de tus pies y apertura de tus piernas, irás trabajando distintas zonas de las piernas.
El ejercicio de step es bastante más sencillo si cabe. Sitúate con la cabeza y espalda rectas y coloca un pie en un escalón. Deberás elevarte con el cuerpo recto mediante la pierna del escalón y regresar con la otra al suelo. Notarás como trabajan tus gemelos principalmente.
En el caso de la zancada tampoco se complica la cosa. Con las manos en la cintura y las piernas juntas, adelanta un pie y ve flexionando las dos piernas lentamente. Te mantienes así un par de segundos, vuelves al estado inicial y repites. Quizás lo más complicado aquí sea mantener el equilibrio.
El puente puede resultar algo más incómodo pero no difícil. Túmbate boca arriba en una colchoneta, flexionas las rodillas mientras tocas el suelo con los pies. Levanta la pelvis para crear un puente recto y repites varias veces. Procura que tu espalda esté completamente pegada a la colchoneta y, al elevarla, no separes los hombros.
Esto son ejercicios básicos, deportes más completos como saltar a la comba o el ciclismo son grandes aliados para fortalecer las piernas.
Así que no te olvides de ellas e incluye esta rutina en tu entrenamiento, los resultados serán muy favorables. Coge tu pantalones cortos de deporte más cómodos, los necesitarás, y mejora tus resultados y apariencia.